Esta es una pregunta que está siempre presente en la
cabeza de los enseñantes: “¿Cómo puedo motivar a mis estudiantes? y creo que es
muy difícil de responder y que depende de cada profesor y de cada alumno por lo
que no es tarea fácil. Esto es aún más difícil cuando están obligados a elegir
una segunda lengua que no les interesa para nada…
En este módulo se nos presenta la idea de que si
queremos motivar a nuestros alumnos hay que tener en cuenta los aspectos
afectivos. Esto me parece muy interesante y creo que es una de las claves de la
motivación. Sin embargo, la experiencia nos enseña que no siempre es fácil
establecer una conexión afectiva con los alumnos y lograr entenderlos para
buscar soluciones que los motiven; a veces esto es, incluso, misión imposible.
Por el momento me he enfrentado a situaciones complicadas y veo que la
motivación de los estudiantes requiere mucha práctica, así que lo seguiré
intentando.
Algo que sé sin duda es que un profesor desmotivado no
motivará nunca a un alumno, así que habrá que empezar por ahí: ¡¡a motivarse
profes!!
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